En el corazón de Arauquita, Colombia, donde la selva se abraza con el llano, reside Yuli Margot, una mujer que ha bordado su historia con hilos de resiliencia y transformación.
“Mi nombre es Yuli Margot Cuevas Estepa, aunque todos me conocen como Liliana. Vivo en la vereda Filipinas, en el municipio de Arauquita, dentro del espacio territorial de reincorporación Martín Villa. Aquí, en este lugar de esperanza y reconstrucción, he encontrado una nueva misión de vida junto a un grupo de mujeres valientes en el taller de AMVOZ, donde nos dedicamos al corte y confección”
AMVOZ, que significa «Asociación de Mujeres Nosotras Tenemos Voz», nació en 2017 como respuesta a los acuerdos de paz en Colombia. Este grupo, conformado tanto por mujeres excombatientes como por mujeres de la comunidad, ha crecido de 50 miembros iniciales a una fuerza diversa y dinámica. “Nuestra misión es clara: cada mujer aquí tiene la oportunidad de desarrollar su propio proyecto productivo, desde la confección de ropa hasta la cría de animales, según sus intereses y necesidades” nos indica con voz determinada Yuli Margot.
Yuli se levanta alrededor de las 5:30, prepara su tinto y su desayuno. Luego, se dirije al taller para trabajar en confecciones. Por las tardes, suele regresar para realizar reparaciones o completar pedidos. Además de trabajar en el taller, participa en actividades comunitarias y agrícolas, y estudia Administración Pública durante los fines de semana
“En los primeros días, nos dimos cuenta de que necesitábamos ropa cómoda, similar a la que usábamos en nuestras vidas anteriores. Así surgió la idea de confeccionar pantalones camuflados. Sin embargo, nuestras habilidades y creatividad nos llevaron a expandirnos hacia otros productos, como pijamas, ropa infantil y ropa interior. Soñamos con convertir nuestro taller en un negocio exitoso que no solo atienda las necesidades de nuestra comunidad, sino que también pueda llegar a mercados más amplios” nos cuenta Yuri Margot mientras prepara su maquina de coser en el taller de AMVOZ
Caminando por el salón, nos va narrando: “We Effect, nos brindó acompañamiento y apoyo, desde la planificación hasta la compra de maquinaria, la construcción del plan, de cómo iba a ser el taller, de qué material lo íbamos a construir, ajustamos el presupuesto a lo que podíamos construir en la instalación que teníamos, hicimos el salón, hicimos la estantería en madera, adecuamos el lugar, compramos las máquinas, y finalmente pues fueron instaladas también con el apoyo de We Effect”
Entre los principales desafíos para las mujeres de AMVOZ están: el fortalecimiento de capacidades en diseño, corte y confección; instalación de capacidades para promocionar e insertar productos en el mercado; uso de las redes sociales para aumentar su alcance en ventas y promoción, entre otros.
Para la asociación AMVOZ, la economía social y solidaria representa un modelo de desarrollo económico centrado en las personas y en el bienestar de la comunidad. Este ecfoqie se basa en los principios de solidaridad, cooperación y justicia social, y se aleja del enfoque tradicional centrado únicamente en el lucro.
“Para mí, AMVOZ no es solo un proyecto productivo; es un símbolo de economía social y solidaria. Nuestra prioridad no es solo vender, sino ofrecer productos de calidad que sirvan a nuestra comunidad. Cada prenda que confeccionamos lleva consigo un mensaje de solidaridad y servicio. Personalmente, me llena de orgullo ver cómo este esfuerzo beneficia a otras mujeres, generando ingresos y promoviendo la independencia” expresa Yuli.
“Mi vida ha cambiado mucho, ahora, me siento independiente y orgullosa de lo que hemos logrado en AMVOZ. Cada esfuerzo, cada prenda terminada, representa un paso más hacia la construcción de una paz duradera en nuestra región. Esta es mi historia, y la historia de muchas mujeres que, como yo, han encontrado en AMVOZ una nueva voz y una nueva oportunidad”
En AMVOZ, seguimos avanzando, apoyadas por We Effect y movidas por el deseo de contribuir a la paz y el bienestar de nuestras comunidades.
Un futuro tejido con hilos de paz
La historia de Yuli Margot es un ejemplo inspirador de cómo las mujeres pueden reconstruir sus vidas y contribuir a la construcción de paz. Su trabajo en AMVOZ no solo genera ingresos y oportunidades para otras mujeres, sino que también teje un futuro más justo y equitativo para Colombia.
We Effect, a través de su apoyo a AMVOZ, contribuye a visibilizar el trabajo de las mujeres reincorporadas y a fortalecer la agenda de paz en Colombia. La historia de Yuli Margot es un testimonio de la resiliencia y el potencial de las mujeres para construir un futuro mejor.