El cooperativismo frente al coronavirus – soluciones colectivas

Los huertos de las cooperativas han asegurado el acceso a verduras y frutas de las comunidades. Foto: Amada Lara Martinez.

Las muertes por coronavirus en América Latina superaron las 50.000 durante la última semana del mes de mayo, y los contagios alcanzan el millón de casos según indican múltiples fuentes informativas. Las medidas de cuarentena y distanciamiento físico, necesarias para frenar la propagación acelerada del coronavirus y salvar vidas, trae consigo mayores tasas de desempleo, incremento de la pobreza extrema, deterioro de la salud, y crisis alimentaria.

En Honduras el panorama no es menos alentador, el 8 de junio 2020 los casos positivos ascienden a 6.450 personas, y a la fecha se han reportado 262 fallecidas según el Sistema Nacional de Gestión de Riesgo (SINAGER). La zona norte es la más afectada y se ha identificado como el epicentro del virus. En la zona sur del país ha llegado con menor dilatación, no obstante, las Cooperativas de Vivienda de Propiedad Colectiva han sido de las comunidades que se han visto afectadas por la expansión del virus. Ya existen tres casos positivos en dos de las 16 cooperativas de vivienda de propiedad colectiva que están situadas en los departamentos de Choluteca y Valle.

El cooperativismo de vivienda es un movimiento que ha avanzado a pasos agigantados en Honduras a través del modelo de ayuda mutua, propiedad colectiva y la autogestión (CVAM). Su membresía está compuesta por 65% de mujeres al frente de familias monoparentales, y están organizadas en un espacio de articulación regional nombrado la Mesa de Cooperativas de Vivienda del Sur de Honduras, MECOOVISURH.

Una serie de medidas colectivas

Ante la propagación del virus, y la desprotección del Estado de Honduras las cooperativas han implementado una serie de medidas comunes para proteger la vida de las socias y socios frente al riesgo de habitar uno de los países con mayor tasa de letalidad por coronavirus en América Latina. Motivadas y motivados por la organización comunitaria lograron adelantarse a la llegada del COVID-19 a través de la aplicación de un diagnostico comunitario que les permitió identificar necesidades y urgencias que las y los cooperativistas afrontaban en contexto de la pandemia. Con esta importante herramienta las cooperativas de vivienda iniciaron a implementar una serie de medidas de prevención como; 1) cierre y control de entradas y salidas de la comunidad; 2) promoción y concientización de la responsabilidad del cuidado individual para proteger a la comunidad; 3) gestión de una red de abastecimiento para proveer de alimentos durante la cuarentena; 4) instalación de controles biosanitarios en las entradas a las cooperativas (fumigación de los vehículos al igual que las personas que ingresan); 5) Gestión y entrega de insumos para control biosanitario en las pulperías a lo interno de la comunidad; 6) gestión de aplicación de pruebas a toda la comunidad. Medidas que les ha permitido detener la expansión acelerada del coronavirus dentro de sus comunidades.

También, las cooperativas están insertadas en promover acciones que aproxime a sus socias y socios en la gestión y acceso del derecho a la alimentación adecuada. Es así como han logrado instalar huertos comunitarios, los cuales han sido un medio de abastecimiento de verduras en medio del aislamiento y confinamiento. Las mujeres, la adolescencia y niñez son quienes lideran el cultivo y el cuidado de los huertos, y son quienes recogen sus productos para distribuirlos en las comunidades.

El huerto de la COVIMARL en Honduras. Foto: Amada Lara Martínez

Exigencias e Inovación

Desde la exigencia de la responsabilidad estatal ante la situación, han logrado respuestas de algunas de las corporaciones municipales, por ejemplo, la alcaldía de San Lorenzo departamento de Valle, ha proveído con raciones de alimentos, e insumos para la bioseguridad (mascarillas, guantes, gel) para centros de abastecimiento y pulperías comunitarias.

Importante resaltar que las cooperativas han visto en la necesidad de innovar las comunicaciones, y han potenciado la conectividad inter-cooperativista logrando crear y acercar medios digitales para sostener las comunicaciones de las realidades, y estrategias que lideran y llevan a cabo en la afrenta del covid-19.

Por

Sara Avilez